"Amo la naturaleza, amo la música de Bach
Amo al árbol, al viento y al caballo
Y guardo para mí un anhelo profundo:
El de sumarme un día a la legión de los anónimos,
sin nombre, sin imagen, sin historia personal,
sólo un canto de amor y paz
que el viento lleva hacia un mundo de hermanos"
Atahualpa Yupanqui
¿Qué es el hombre sin la naturaleza? Un ser que deambula dormido en la oscuridad de la rutina y el materialismo, de la egolatría y egocentrismo. En definitiva, un ser destructivo con el medio qu e le soporta, con sus semejantes y sobre todo consigo mismo. Sin comprender, respetar y admirar la maravilla de lo vivo el humano poco a poco, se marchita en vida.
La Música, sigue e imita la armonía de la Naturaleza, de esto sabían bien Don Atahualpa y Johann S. Bach. Dos maestros que nos dejaron su legado para no perdernos en el caos y en la oscuridad.
Su música sigue siendo una antorcha...