Contemplar este presente, para vislumbrar y entusiasmarnos con aquello que siempre queda, que permanece, porque conmueve, porque siempre aporta luz. La contemplación es un arte, el arte de saber observar con paciencia, discernimiento, comprensión, nos ubica en cada instante , nos centra. La contemplación nos demanda parar. No es un reposar ocioso, es un reposar responsable. Salirse del ruido mundano por un tiempo, para volver renovado, purificado. La Naturaleza, la música nos guía. Que así sea.
"Las condiciones del pájaro solitario son cinco. La primera, que se va a lo más alto; la segunda, que no sufre compañía, aunque sea de su naturaleza; la tercera, que pone el pico al aire; la cuarta, que no tiene determinado color; la quinta, que canta suavemente. Las cuales ha de tener el alma contemplativa: que se ha de subir sobre las cosas transitorias, no haciendo más caso de ellas que si no fuesen; y ha de ser tan amiga de la soledad y silencio, que no sufra compañía de otra criatura; ha de poner el pico al aire del Espíritu Santo, correspondiendo a sus inspiraciones, para que, haciéndolo así, se haga más digna de su compañía; no ha de tener determinado color, no teniendo determinación en ninguna cosa, sino en lo que es voluntad de Dios; ha de cantar suavemente en la contemplación y amor de su Esposo".
"Si purificares tu alma de extrañas posesiones y apetitos, entenderás en espíritu las cosas; y si negares el apetito en ellas, gozarás de la verdad de ellas entendiendo en ellas lo cierto".
La novela
titulada El idiota, del escritor ruso Fiodor Dostoievsky, es una de
las obras más grandes de la literatura mundial, hay en ella
contenida toda una descripción tan profunda de la psique y el alma
humanas personificadas en los diversos personajes que en ella salen
que es digna merecedora de catalogarla de tal manera.Tan vasto es el
mundo, los sentimientos, anhelos, pensamientos de cada personaje que
cada lector puede sentirse identificado, si no plenamente con ellos,
sí en determinadas ocasiones. No es muy conocida pero existe una
serie televisiva que se realizó por Radio televisión Española
basada en la novela del escritor ruso, de unas actuaciones y puesta
en escena impecables. También basada en El idiota, está la película
de Akira Kurosawa aunque algo cambiado el argumento, igualmente
sublime.
El idiota es
intemporal, continuamente vigente pues es al espíritu humano a quien
habla. Sólo a través de las vivencias de los personajes, podremos
comprender y hasta llegar a comprender nuestras propias
contradicciones y anhelos.
Muchísimos
personajes salen en la obra -tantos que se haría extensísimo hablar
de ellos- pero el principal es el que da título a la novela, el
llamado "idiota", un joven de 27 años cuyo nombre es Liov
N. Mishkin, quien desde niño sufría una tremenda enfermedad
-epilepsia- que lo dejaba en un estado, según él mismo define, de
idiotez. Huérfano siendo niño es acogido bajo tutela por un amigo
del padre y curado de su enfermedad en el extranjero en las montañas
suizas, para más tarde regresar a su patria rusa. Una vuelta que
emprende en solitario, sin un "copeck" y sólo contando
con un familiar lejano para su acogida. Pero Mishkin, a pesar de las
penalidades, es un joven lleno de entusiasmo e ideales para emprender
en su patria... Su inexperiencia en el trato con el mundo social
moderno choca con la bondad y honestidad natural y espontánea de
Mishkin, éste no sabe sopesar lo depredador que es ese mundo y
llevan al joven personaje a envolverse en complejos asuntos de los
cuales cada vez se ve más enredado... A partir de aquí ya el
desarrollo de toda la obra cobra sustancia, a medida que el príncipe
va conociendo a más y más gente de la ciudad.
Aquí algunas
de las frases más llamativas de la obra:
"Lo
más odioso y vil que tiene el dinero es que hasta otorga talento. Y
así será hasta el fin del mundo".
"Desde
tiempo inmemorial,en el mundo entero se considera la falta de
originalidad como la mejor recomendación, como virtud propia del
hombre a quien se conceptúa sensato, laborioso práctico; y el
noventa y nueve de los individuos ( y nos quedamos cortos) han sido
siempre de este parecer; quizás uno entre cien opine de distinta
manera".
"A
los inventores y a los hombres geniales se los ha considerado, por
regla general, como tontos, especialmente al principio (muchas veces
al final) de sus carreras".
"El
espíritu del progreso en los últimos siglos, en sus aplicaciones
prácticas y científicas, es corruptor".
"¿Cómo
es posible que haya quien se sienta desgraciado? ¡Qué importa mi
aflicción, mi desgracia si me reconozco capaz de ser feliz! Sabed
que yo no comprendo el que pueda uno pasar junto a un árbol sin
sentir al verlo algo así como una gran felicidad, ni hablar con un
hombre sin que la dicha de amarle llene el corazón de gozo (...)
¡Cuántas cosas bellas vemos a cada paso, tan bellas que hasta el
hombre más abyecto ha de admirar su hermosura! ¡Contemplad a un
niño, contemplad la aurora del Creador, la hierba que crece, los
ojos que os contemplan y que os aman!..."
También
os recomendamos ver la serie de Radio Televisión Española
basada en "El idiota" cuyo guión guarda mucha fidelidad al
texto. Todas las interpretaciones son llevadas a cabo con gran
maestría. Cabe destacar la actuación del protagonista, Principe
Mishkin, del actor Emilio Gutiérrez Caba. La serie consta de veinte
capítulos que se pueden visionar en la web de Radio Television
Española.
"Debe resultar una
armonía biensonante para honra de Dios y lícito regocijo del
espíritu, puesto que, como lo es para toda la música, su fin y su
causa última no ha de ser otra que la honra de Dios y la recreación
del espíritu. Cuando no se toma en cuenta esto, no será música
propiamente dicha, sino una cacofonía diabólica" (J.S. Bach,
1738).
La música de
Bach debe ser percibida como una vivencia donde debe participar tanto
lo auditivo como lo espiritual, ya que como él mismo afirmaba, el
fin más alto de la música debe ser el regocijo del espíritu. La
música como una ofrenda en el más puro de los sentidos (recordar La
Ofrenda Musical
BWV 1079 que enlazo más abajo, título que sugiere el profundo
propósito de su música). Ofrenda, viene de ofrecer, el acto de un
agradecimiento reverencial, lo más sagrado y puro llevado por el
sacrificio personal, que una persona puede aportar para hacer ese
agradecimiento o dádiva. Este gran maestro no sólo nos dejó el
inmenso legado de sus obras para regocijo del espíritu sino que
inspiró a muchos otros grandes compositores que vinieron tiempo
después. Johann Sebastian Bach comprendía que hay un orden divino,
superior en la armonía musical, sus obras están basadas bajo ese
paradigma y tal es así que consideró su música como algo de
muchísima valía. En su época no se le comprendió del todo es por
ello que hasta casi un siglo después de su muerte, en 1750, su obra
sólo la conocían los músicos profesionales. Algunas observaciones
de músicos contemporáneos sobre la música de Bach:
"No
hay otra música con tal carga emocional. Es música de la más alta
categoría"
"Su
presencia es demasiado importante para imaginar un mundo sin él".
"Sino
hubiera conocido a Bach yo estaría muerto". James Rhodes del
libro "Instrumental"
Su obra está considerada
como uno de los logros más grandes de la música.
En su más
célebre obra titulada "El Clave bien temperado" una
colección de 24 preludios y fugas como dejó el mismo compositor
apuntado en la portada "Para el beneficio de los jóvenes
músicos con deseos de aprender". La afinación bien
temperada es una afinación por octavas que se dividían en doce
semitonos, por lo cual por primera vez se podía tocar en cualquier
tono. Trabajo que se tomó el mismo Bach en escribir preludios y
fugas en cada tono diferente. Muchos músicos y compositores
consideraban esta obra como "el Viejo Testamento de la música".
El pianista Andras Schiff declara que interpreta a diario algunas
piezas de El clave bien temperado, según sus palabras "Es
como darse una ducha para limpiarse a fondo. Es algo que te purifica
el espíritu, el alma e incluso físicamente (...) Te entran ganas de
saltar, de bailar y una alegría de estar vivo". Además nos
dice esta hermosa frase: "Su música es emocional y
romántica, en el sentido real de la palabra. Está llena de
sentimiento, de ondulaciones. Para mí no hay líneas rectas en Bach,
todo son ondulaciones".
Aquí comparto con vosotros un documental muy bien hecho sobre la vida y obra de Bach.
Y aquí en concierto La Ofrenda Musical por Jordi Savall.
Como invalorables joyas copio y publico una pequeña selección de
frases que he ido recopilando a lo largo de mis lecturas sobre
culturas nativas. La sabiduría de los pueblos nativos es muy honda y
amplia. Necesaria para poder comprender el estancamiento que adolece
la cultura occidental actual y sobre todo, necesaria para
comprenderse y entenderse dentro de un mundo natural que es
inabarcable para la razón pero no tanto así para el corazón. Hemos
olvidado muchas cosas, hemos olvidado al árbol como igual, ya no
sabemos escuchar a las aves ni a los demás hermanos; hemos cubierto
nuestro cuerpo con ropajes extraños y, nuestro alimento es
engullido ávidamente, cual si fuéramos ladrones. No agradecemos al
creador y ni a la naturaleza por el sol ni por el agua ¿En qué
nos estamos convirtiendo? La lectura de algunas de estas frases quizá nos puedan volver a conectar con una sabiduría ancestral...
Extraído del libro La pipa sagrada, ritos sioux. Alce Negro
"Los
cuatro «Vientos» son como las «Potencias productoras» (en el
sentido del término sánscrito Shakti) de las «Regiones del Mundo»,
y se conciben como dando la vuelta al horizonte y determinando la
vida terrestre mediante sus influencias combinadas. El viento es como
el «aliento» del mundo terrestre en el que vivimos; representa así
la «respiración» cósmica. El «aliento» es en cierto sentido el
vehículo del «alma» o del «espíritu»; de ahí la conexión
etimológica de estas palabras en muchas lenguas; pero es también el
vehículo activo de la vida, pues él es quien alimenta y purifica la
sangre, soporte pasivo e inferior del elemento vital. El «aliento»
es, pues, al mismo tiempo, el «alma» de la «vida», y está hecho
así a imagen del Verbo divino cuyo «Aliento» creador ha hecho al
hombre."
"Así
mismo, hay cuatro edades a través de las cuales toda cosa creada
debe pasar: la primera es el Sur, que es amarillo y es la fuente de
toda vida, y ésta es la primera edad en un ciclo histórico, la
segunda es el Oeste, que es negro; la tercera es el Norte, que es
blanco; y la cuarta, el Este, que es rojo: la humanidad terrestre se
halla actualmente en la cuarta edad, que se terminará con un gran
desastre. Esta repartición, que atribuye la «Edad de oro» al Sur y
la «Edad de hierro» al Este, mientras que las demás doctrinas
tradicionales atribuyen la primera al Norte y la segunda al Oeste
(...) en lo que concierne a la «Edad de hierro» —el Kali-Yuga—,
si bien es evidentemente justo atribuirlo, según la perspectiva
geográfica del «Viejo Mundo», al Oeste, ya que es allí donde el
sol se pone y donde ha tenido nacimiento el materialismo moderno que
extiende sus tinieblas a la humanidad entera, no es menos cierto que,
para los pieles rojas, este materialismo destructor de la Naturaleza
viene del Este; es allí donde se sitúa lo que, para los orientales,
es el «oscuro Occidente» y es de allí de donde han venido estos
«espíritus» (washichun) de rostros pálidos que han exterminado a
la raza roja"
«Todo lo
que hace un indio, lo hace en un círculo, y es así porque el Poder
del Universo actúa siempre mediante círculos, y todas las cosas
tienden a ser redondas. En los días de antaño, cuando éramos un
pueblo fuerte y feliz, recibíamos todo nuestro poder del círculo
sagrado de la nación, y mientras el círculo permanecía entero, el
pueblo florecía. El árbol florido era el centro vivo del círculo,
y el círculo de las cuatro direcciones lo nutría. El Este daba la
paz y la luz, el Sur el calor, el Oeste la lluvia, y el Norte, con su
viento frío y potente, daba la fuerza y la resistencia. Este
conocimiento nos vino del mundo exterior (el Mundo trascendente, el
Universo), con nuestra religión. Todo lo que hace el Poder del
Universo lo hace en forma de círculo. El cielo es circular, y he
oído decir que la tierra es redonda como una bola, y también las
estrellas son redondas. El viento, en su fuerza máxima, se
arremolina. Los pájaros hacen sus nidos en forma de círculos, pues
tienen la misma religión que nosotros… Nuestras tiendas (tipis)
eran circulares como los nidos de los pájaros y estaban siempre
dispuestas en círculo: el centro de la nación, un nido hecho de
muchos nidos, en el que el Gran Espíritu quería que cobijáramos a
nuestros hijos.» (Black Elk Speaks.)
"El
aplastamiento de la raza india es trágico porque el hombre rojo no
podía sino vencer o morir; ha sucumbido porque representaba un
espíritu incompatible con el mercantilismo de los «rostros
pálidos». Podría definirse este drama inmenso como la lucha, no
sólo entre una civilización mercantil y materialista y otra
caballeresca y espiritualista, sino también entre la civilización
urbana —en el sentido estrictamente humano y peyorativo de este
término, que implica una idea de «artificio» y de «servilismo»—
y el reino de la Naturaleza, considerada como la vestidura
majestuosa, pura e ilimitada, del espíritu divino. Ahora bien, la
Naturaleza, de la que el indio se siente como la encarnación y que
es al mismo tiempo su santuario, acabará por vencer a este mundo
artificial y sacrílego, pues ella es la Vestidura, el Hábito, la
Mano misma del Gran Espíritu.
"Debemos
comprender que todas las cosas son obra del Gran Espíritu. Debemos
saber que Él está en toda cosa: en los árboles, en las hierbas, en
los ríos, en las montañas, y en todos los cuadrúpedos y los
pueblos alados; y, lo que es aún más importante, debemos comprender
que Él es también más allá de todas estas cosas y de todos estos
seres. Cuando hayamos comprendido todo esto profundamente en nuestros
corazones, temeremos, amaremos y conoceremos al Gran Espíritu;
entonces nos esforzaremos para ser, actuar y vivir como Él quiere".
"Con
esta Pipa de misterio caminaréis por la Tierra; pues la Tierra es
vuestra Abuela y Madre y es sagrada. Cada paso dado sobre ella
debería ser como una plegaria".
"Cada
aurora que llega es un acontecimiento sagrado, y todos los días son
sagrados, pues la luz viene de vuestro Padre Wakan-Tanka; y debéis
también acordaros siempre que los hombres y todos los demás seres
que están en esta Tierra son sagrados y deben ser tratados como
tales".
" El
indio se identifica espiritualmente con la Cualidad cósmica —o
divina— del ser o la cosa que se le aparece en una visión, ya sea
un mamífero, un pájaro, uno de los elementos o cualquier aspecto de
la creación. Para que este «Poder» nunca le abandone, el indio
lleva siempre encima alguna forma material que representa al animal u
objeto del que ha recibido su «Poder». Estos objetos a menudo han
sido llamados «fetiches», lo cual es impropio, pues corresponden
más precisamente a lo que los cristianos denominan «Ángeles de la
guarda»; para el indio, los animales y todas las cosas inanimadas
son los «reflejos» —en una forma material— de los Principios
divinos. El indio no se ata a la forma como tal, sino al Principio
que está en cierto modo «contenido» en la forma".
"Todos
estos pueblos son importantes, pues son sabios a su manera y pueden
enseñarnos muchas cosas a nosotros, los bípedos, si adoptamos una
actitud humilde ante ellos. De entre todas las criaturas, las más
dignas de atención son las aves; son las que se hallan más cerca
del cielo y no están atadas a la tierra como los cuadrúpedos o los
pequeños pueblos reptantes. Conviene señalar que no es algo
gratuito el que los humanos seamos bípedos como las aves; pues veis
que éstas abandonan la tierra con sus alas y que nosotros, los
hombres, podemos también salir de este mundo, no con alas, sino con
el espíritu. Esto os ayudará a comprender en parte por qué
consideramos sagrados e importantes a todos los seres creados: toda
cosa posee una influencia —wochanghi— que puede sernos dada y
gracias a la cual podemos adquirir un poco más de comprensión si
estamos atentos".
"La
primera paz es la más importante: es la que surge en el alma de los
hombres cuando se dan cuenta de su parentesco, de su unidad, con el
Universo y todos sus Poderes, y cuando se dan cuenta de que en el
centro del Universo mora el Gran Espíritu, y que en realidad este
centro está en todas partes; está en cada uno de nosotros. Ésta es
la paz real; las otras paces no son sino reflejos de ella. La segunda
paz es la que se establece entre dos individuos; la tercera es la que
se concierta entre naciones. Pero debéis comprender que nunca puede
haber paz entre naciones antes de que se sepa que la verdadera paz,
como he dicho a menudo, está en el alma de los hombres".
Extraído
de El libro de los Hopis, Waters Frank
El primer
Mundo fue Tokpela [Espacio Infinito]. Pero antes, dicen, estaba sólo
el Creador, Taiowa. Todo lo demás era espacio infinito. No había
principio ni fin; no había tiempo ni forma ni vida. Sólo un vacío
inmenso cuyo principio y fin, tiempo, forma y vida estaban en la
mente de Taiowa el Creador. Todos los centros vibratorios a lo largo
del eje de la Tierra, entre Polo y Polo, resonaron con su llamada.
Tembló toda la Tierra. El universo se estremeció en armonía con su
voz. Así, hizo de todo el mundo un instrumento de sonido; y del
sonido, un instrumento para transmitir mensajes, para hacer resonar
la alabanza del Creador de todas las cosas.
"El
Primer Pueblo entendía, pues, el misterio de su origen. Su sabiduría
prístina también les revelaba su propia estructura y funciones, la
naturaleza del hombre. El cuerpo vivo del hombre yel cuerpo vivo de
la Tierra estaban construidos en la misma forma. Un eje atravesaba
cada uno de ellos. El eje del hombre era la espina dorsal, la columna
vertebral que controlaba el equilibrio de sus movimientos y
funciones. A lo largo del eje había varios centros vibratorios que
repercutían el sonido primordial de la vida en todo el universo o
daban aviso si algo estaba mal.
En el ser
humano, el primero de ellos se encontraba en la parte superior de la
cabeza. Ahí estaba, al nacer, el punto blando, kópavi, la "puerta
abierta" por la que recibía su vida y se comunicaba con su
Creador. A cada soplo de aliento el punto blando subía y bajaba en
suave vibración, la cual se comunicaba al Creador. A la hora de la
luz roja, Tálauva, la última fase de su creación, el punto blando
se endurecía y la puerta se cerraba. Permanecía cerrada hasta su
muerte, momento en que se abría para que su vida saliera por donde
había venido. Justo debajo se hallaba el segundo centro, el órgano
con el que el hombre aprendía a pensar por cuenta propia, el órgano
pensante llamado cerebro. Su función terrenal permitía al hombre
pensar sobre sus acciones y su obra en esta Tierra. No obstante,
entre más entendía que su obra y acciones debían ser conformes al
plan del Creador, más claro se le hacía que la verdadera función
del órgano pensante llamado cerebro era cumplir con el plan de toda
la Creación. El tercer centro estaba en la garganta. Unía las
aberturas de la nariz y la boca, por las que recibía el aliento de
la vida, con los órganos vibratorios que le permitían devolver su
aliento en forma de sonido. Este sonido primordial, como el que
provenía de los centros vibratorios del cuerpo de la Tierra, estaba
en armonía con la vibración universal de toda la Creación. Los
órganos vocales producían sonidos nuevos y diversos en forma de
habla y canto, su función secundaria para el ser humano en la
Tierra.
El cuarto
centro era el corazón. También constituía un órgano vibratorio.
Latía con la vibración de la vida misma. En su corazón el ser
humano sentía el bien de la vida, su propósito sincero. Era de Un
Corazón. Sin embargo, había quienes dejaban pasar sentimientos
malos. De ellos se decía que eran de Dos Corazones. El último de
los centros importantes del hombre estaba debajo del om- bligo, en el
órgano denominado ahora plexo solar por algunas personas. Según
indica el nombre, era el trono del propio Creador dentro del hombre.
Desde ahí dirigía todas las funciones del ser humano".
En el
segundo mundo: "Sin embargo, no poseían el privilegio de vivir
con los animales, pues éstos eran salvajes y se mantenían aparte.
Separados así de los animales, los seres humanos atendían sus
propios asuntos. Construían hogares; luego pueblos, y senderos para
unirlos. Fabricaban cosas con las manos y almacenaban el alimento,
como el Pueblo de las Hormigas. Luego empezaron a comerciar y a
trocar mercancías entre ellos. Entonces comenzaron los problemas. El
Segundo Mundo tenía todo lo que necesitaban, pero querían más.
Cambiaban más y más por cosas que no hacían falta. Entre más
bienes obtenían, más deseaban tener. Era un problema muy grave. No
comprendían que paso por paso estaban alejándose de la buena vida
que se les había dado. Olvidaron cantar alabanzas regocijadas del
Creador y pronto comenzaron a cantar las alabanzas de la mercancía
que intercambiaban y almacenaban. Al poco tiempo sucedió lo que
tenía que suceder. Los seres humanos empezaron a reñir y a pelearse
entre ellos, y se suscitaron guerras entre los pueblos. Todavía
quedaban en cada pueblo unas cuantas personas que cantaban la Canción
de su Creación. Sin embargo, los perversos se burlaron de ellas.
Finalmente sólo podían cantarla en sus corazones. Aun así
Sótuknang las oyó, a través de los centros de sus cuerpos y los
centros de la Tierra".
"El
símbolo suele conocerse por Tápu'at [Madre e Hijo]. El tipo
cuadrado representa el renacimiento espiritual que ocurre al pasar de
un mundo al siguiente, el cual es simbolizado por la propia Salida.
En el dibujo, la línea recta que sobresale de la desembocadura no
está integrada al laberinto. Sus dos extremos corresponden a las dos
etapas de la vida: el niño aún no nacido, en la matriz de la Madre
Tierra; y el niño después de nacer. La línea representa el cordón
umbilical y el sendero hacia la Salida. Al voltear el dibujo de
manera que la línea quede en posición vertical, señalando hacia
arriba de la página, se ve que el extremo inferior está envuelto en
forma de "u" por el laberinto. Las líneas interiores
figuran las membranas fetales que encierran al niño dentro de la
matriz; y las exteriores, los brazos de la madre que más tarde lo
sostendrán. La forma yel significado del tipo circular son
ligeramente distintos. La línea central en la desembocadura está
unida directamente con el laberinto. El centro de la cruz así
formada simboliza al Padre Sol, dador de la vida. Dentro del
laberinto las líneas terminan en cuatro puntos distintos. Todas las
líneas y los pasajes interiores representan el plan universal del
Creador, que el hombre debe seguir al avanzar por el Camino de la
Vida. Los cuatro puntos figuran los puntos cardinales o de dirección
abrazados por dicho plan universal de la vida. La "doble
seguridad", o sea, el renacimiento, es garantizado al que cumpla
con el plan, lo cual queda manifiesto en el abrazp del niño por la
madre. El tipo circular simboliza, asimismo, los límites
concéntricos de la tierra reclamada tradicionalmente por los hopis".
Sobre las profecías
hopis:
“Solamente
aquellos que regresen a los valores de las viejas maneras serán
capaces de encontrar paz mental. Porque en la Tierra hemos de
encontrar alivio de la locura que estará a nuestro
alrededor..."
De un hermoso libro
titulado "La educación de Pequeño Arbol" escrito por
Forrest Carter un nativo cheroqui que narra su infancia en la montaña
en compañía de sus abuelos:
"Para
los abuelos amor y comprensión eran la misma cosa. Abuela aseguraba
que era imposible amar lo que no entendías, que no podías amar a
las personas o a Dios si no los entendías.
Como los
abuelos se comprendían tenían amor. Abuela decía que la
comprensión se hacía más profunda con el paso de los años y que
era algo que estaba más allá de lo que los mortales podían
inventarse o explicar. Por eso lo llamaban "emparentarse".
Abuelo
decía que, antes de que él naciera la palabra "parientes"
se usaba para referirse a toda persona que entendías y con la que te
entendías, aludía a los "seres queridos". Pero la gente
se volvió egoísta y fue reduciendo el significado hasta limitarlo a
los parientes de sangre cuando, en realidad, este nunca fue su
sentido".
Extraído
de Mapuches, la ciencia secreta. Aukanaw
Es
sabido que todo Machi (chamán) para ser iniciado en su sacerdocio
debe pasar por una serie de pruebas rituales que, de aprobarlas, lo
cualificaran para la función. Estas pruebas se hallan presentes a lo
largo de un viaje místico, e implican sin excepción un descenso al
mundo inferior y la muerte simbólica del candidato, para ascender
posteriormente a la región celestial o superior con un segundo
nacimiento en un estado trascendente del ser, volviendo finalmente al
Mundo Medio, el de los humanos.
El
mundo inferior está situado simbólicamente en el interior de la
Tierra, pero no en su centro, y para las tradiciones chamánicas las
entrañas de la tierra son "entrañas" propiamente dichas,
intestinos, Küllche, con el sentido implícito de útero, matriz o
seno materno. Estas con sus innumerables circunvoluciones son las que
recorre el machi en su descenso, y por esas mismas tripas salieron
los primeros hombres (Lliche) en uno de losciclos
cósmicos de la sagamapuche,
lo mismo dicen los hopi de Norteamérica y para ellos el laberinto es
el símbolo de la Madre Tierra. Compartían igualmente esta idea los
toltecas. Para los mesopotámicos las tripas eran la representación
de la Tierra.
Los
Machis transmiten a su pueblo en signos, cantos y danza, la
naturaleza de la geografía cósmica que les ha sido revelada en el
proceso de sus trances iniciatorios y viaje del alma. A veces estos
mapas son tridimensionales: esculturas, maquetas, p'raprawe, etc.
Este es el significado de las pinturas rupestres con forma de rastro
de pisadas, humanas o zoomórficas.
Toda
expresión "artística" de los aborígenes es algo sagrado,
es una representación gráfica de lo que se puede percibir en otros
ordenes de la Realidad, de ningún modo es fruto de la imaginación o
de la "creatividad". Es un retrato realista, pero
estilizado, de algo objetivo.
El
hecho que los "blancos" (wingka)
sean incapaces de percibir estos Ordenes de Realidad, puesto que su
conciencia está atrofiada, les torna incomprensible todo aquello que
para el aborigen es autoevidente. El ciego puede no comprender los
colores y en consecuencia negar que existan, también puede
considerarlos como alucinaciones de los videntes; pero a su despecho
los colores siguen existiendo.
Un
avatara es la individualización del Ser Universal (= Dios). Dicho en
otras palabras el descenso de Dios en el mundo de los seres humanos
para la prolongación de un periodo de tiempo cósmico. Todos los
pueblos indígenas americanos conocieron a este personaje,
designándolo con distintos nombres: Gukumatz, Wirakocha, Tunapa, Paí
Xué, Bochica, Kukulkan, Paí Abaré, Tomé , Votán, Elal, etc. Los
mapuches lo conocen con varios nombres, algunos públicos otros
secretos, algunos de ellos son: Mareupuantü, Trengtreng, Ng’ng’n,
Antü tañi fotüm, Küme Wenüi, Ngen Mapu, Kristo Mapuche, etc.
La
Divina Presencia es representada en una postura semejante a aquella
de los batracios o a la de una mujer parturienta, pero a pesar de
esto no surge de ellas, sino del misterio de la CRUZ. El Maestro es
uno con la cruz, y la cruz es una con él. Él reveló la cruz
mapuche y ella guardó las divinas enseñanzas. Él es la síntesis
del Gran Padre celeste y la divina Madre Tierra, del principio
Esencial y del Substancial, el es hijo del Cielo-Sol y de la Tierra,
es Pájaro y Serpiente, es Pájaro y Jaguar.
Su
figura surge de la conjunción de las dos serpientes cósmicas, una
activa y otra pasiva, ellas en su entrecruzamiento (síntesis) forman
una cruz. La cruz es el símbolo del cosmos y del maestro, entre los
dos hay identidad, ambos son síntesis de los dos grandes principios
extra-cósmicos generadores del Cosmos. Esas dos serpientes son las
mismas que vemos en el calendario azteca, como sierpes emplumadas en
cuya boca asoma Kukulkan, son las mismas que rodean al Maestro en la
placa de Lafone Quevedo, o en la Puerta del Sol de Tiawanaku, son los
Cristo-serpientes del anfisbena, o son aquellas que en Europa y Asia
forman el Caduceo. Estos ofidios pueden ser reemplazados por sus
equivalentes: el felino (jaguar), el oso, el "caimán"
(cipactli), el "dragón americano", etc..
El
mapuche tradicional vivencia desde la cuna lo sagrado, conoce aquello
que el occidental moderno hace muchos siglos ha perdido.
Félix
Rodríguez de la Fuente hablando del pueblo yanomamo de la selva
amazónica:
"No hay ni flacos ni
obesos. No veo gestos angustiados ni depresivos. Viven perfectamente
adaptados al medio que les soporta. Aquellos waicas-contrariamente a
los infelices civilizados-disponen la mayor parte del tiempo para la
conversación, el descanso, el juego, las danzas y los ritos. Reina
la paz, la cohesión y la ayuda mutua. La selva les nutre con su
savia".
A Félix
le impresionaba profundamente el respeto que observó en casi todos
los pueblos aborígenes que visitó, el desagravio al animal abatido
en la caza puramente de subsistencia, el desagravio, el perdón a la
selva, al bosque por tomar la vida de alguna de sus criaturas.
"¡Díos
mío...! Pero ¿por qué serán tan tristes los indios?...¿Será
acaso por les hemos quitado tantas cosas? ¿Será porque hemos roto
sus mitos, pulverizado su civilización? ¿Será porque los indios de
la selva son los últimos que en los últimos reductos se están
defendiendo del contagio, de las enfermedades, se están defendiendo
del egoísmo de la cultura, se están defendiendo de la evolución
tremenda e irreversible de la especie humana?"
Félix
R. De la Fuente
Extraido de el libro "El buscador de sueños" de Romano
Battaglia, RBA 2005
"Ellos (se refiere a los nativos norteamericanos) también
amaban la naturaleza y deseaban la paz de los pueblos. Fueron
perseguidos injustamente y expulsados de sus tierras. Sus sombras
vagarán eternamente por las praderas, como testimonio de un pueblo
que odiaba los senderos de la guerra y recorría los de la paz. Su
historia está escrita en la montaña del Gran Espíritu y nadie
podrá borrarla jamás, ni siquiera nuestras lágrimas."
"El círculo representa la perfección y la continuidad. Los
anillos de los árboles son concéntricos y nuestra vida está
contenida en un círculo."
"La humanidad está gravemente enferma de egoísmo y de
poder. El hombre cree que ha alcanzado la cima del conocimiento, que
es el amo y el controlador supremo de los fenómenos más
inexplicables de la naturaleza y del universo"
"El hombre envejece, pero no madura, y arrastra tras de sí
el fardo de los errores causados por su arrogancia."
"El vacío de la humanidad se reproduce todos los días, es
como un muro de piedra: todo lo que choca contra él se destroza"
"Delante del espejo, a menudo el hombre sólo advierte lo que
gusta ver y generalmente no se encuentra defectos."
"Cuando se siente superior y muestra indiferencia hacia el
prójimo, lo hace porque detrás del espejo se esconde su conciencia,
que es la brújula de lo desconocido."
Por último quería
recomendar algunas películas sobre la problemática de los nativos
americanos con el choque de esta civilización, la primera en este
caso la que narra la historia de un anciano del pueblo mapuche en la Patagonia argentina, el papel de la justicia en el permanente robo de
las tierras de los mapuches.
La Nave de los Locos, dirigida por Ricardo Wullicher
El largo viaje de Nahuel
Pan, una excelente película sobre el viaje de un hombre mapuche a la
ciudad de Buenos Aires para reclamar ante las autoridades los
derechos de su pueblo.